El hombre, hasta el momento ha permanecido en la cima de la
pirámide depredadora y no existe en la actualidad ninguna criatura que le
dispute el puesto.
El mayor asesino de la tierra es el hombre y hasta mata por
deporte.
El depredador mata para sobrevivir El hombre es auto destructor.
Destruye su hábitat con verdadera saña, como si odiara la morada en que vive, y a las criaturas que le acompañan y viven con
él.
Acaba con las plantas que son su abrigo, su alimento y medicina, sin el
menor agradecimiento, sin la más mínima consideración.
Destruye y aniquila. Bombardea
la tierra y todo ser vivo que se le atraviese con fuerza destructora.
El hombre busca utilizar los recursos que le brinda la
naturaleza en su beneficio, y no está mal que se intervenga en cierta medida en
el ciclo natural, pero es necesario siempre respetar el equilibrio interno
elemental de la vida con el medio ambiente.